Prométeme el
Cielo a pedacitos.
Sumérgeme en
champagne y prométeme la Luna.
Báñame el
dedo, de doradas promesas.
Encáuzame y
permíteme la perdición.
Prométeme,
que yo ya me miento.
Abre Océanos
a mi paso y conviérteme en Afrodita.
Y si oso
mirar hacia otro lado, rómpeme el alma en mil pedazos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario