Hipócritas Cineastas

Si tu eres feliz, vende-me una película que yo te la compro.

Cuando una se convierte en un personaje público (estrella estrellada de extrarradio), tanto si quiere como no, una se entera de las bajas pasiones de los “amigos “que le rodean. Incombustibles de barra, compañeros de escena y amigas que te acompañan, como cual quinceañera al baño hacer pipí…

No deja de sorprenderme la película que construyen, para anular el polvo de la noche anterior. Si se toman tantas molestias para crear tales paradigmas, que suelen acabar en casa durmiendo y solo, no hice nada, que se durmió en un sofá… A mí me parece mucho peor que hayas querido ir a la guerra y te hayas dormido en la trinchera, en vez de haber liquidado al enemigo a base de felaciones.

                                                ¡Manda huevos! 

Sigue estando mal visto entonces follar y fornicar, por el mero hecho de acogerse en brazos de la Sodomía, se supone que vas a ser menos persona…

O, no hemos avanzado nada o realmente no somos confidentes y por lo consiguiente amigos, o lo peor se sienten culpables (educación Apostólica Cristiana Romana, Provincial Macho Alfa).

Si quiero ir al cine os aseguro que la película escogida, no acaba con los protagonistas durmiendo cada uno en su casa, es más demandaría al Director y exigiría que me devolvieran el dinero de la entrada.

Con el paso del tiempo, las largas noches y mañanas a mi espalda, las grandes juergas y los días de “renganche”, sigue tocándome la moral muy mucho la falsedad entre congéneres.

Por este orden:

Drogas.- Nadie se droga en España, pese que cuando acabe la noche solo hayan visto los azulejos de diversos baños.

 Sexo Esporádico.- Ni pensarlo, todos puros y blancos al Altar, guardando la flor y a la espera de la prueba del pañuelo.

 After Hours.- Jamás nadie pisa tales locales de perdición, es más se mantienen gracias ayudas del Estado….Anda qué!

La hipocresía me parece un insulto directo a mi inteligencia, un atentado a la naturaleza humana y una falta de respeto a uno mismo.

Que no debata tus mentiras, no significa que no sepa la verdad y lo que te convierte en guarra es no reconocer quién eres. No soy yo quién te cuelga el “Sant Benito” te lo cuelgas tu mismo por mentiroso.

 

Sigue con tu carrera cinematográfica, pero asegúrate de que sea de Oscar y cómprate una cámara al menos, que tus últimas películas te han dejado sin  credibilidad ante esta  "supuesta" amiga.